miércoles, 13 de julio de 2011

En verano las cosas cambian de color...

No se si cambian de color, o se ven de otro color...... Ya comenzado el verano, sí que el sentimiento es mucho más positivo, más esperanzador, los avances de Dani se ven con más esperanza de continuidad en el tiempo.






Ha habido una temporada que Dani echaba su brazo mucho para atrás, le desequilibraba y le hacia caer al suelo, tenia mucha rigidez. Han sido unas semanas, y ahora esta mejor, su brazo esta más relajado. El va evolucionado en su lenguaje, aunque sigo pensando que habrá que trabajarlo a la vuelta de verano. Cada vez mantiene más el equilibrio y se cae menos.




Ha aprendido a levantarse él solo cuando se cae, y ha sido todo un logro!.




Hay una cosa que sí nos preocupa, y que espero que con el tiempo se vaya corrigiendo, y es su rodilla derecha, tiene rotación interna, y se debe a que al no ir completamente estirado al andar, su cadera no esta simétrica, la parte derecha se va hacía adelante y su rodilla se rota hacia dentro. Lo que más me preocupa es que no quede otra solución en un futuro que la operación. Pero bueno no adelantaré acontecimientos.






Por lo demás, empieza ya la fase dura de las respuestas al entorno. Me explico, hasta ahora los niños eran muy pequeños no se daban cuenta de la limitación de Dani, o de que tenia algo "diferente", y ahora en alguna ocasión algún niño me ha preguntado, ¿por que lleva eso? ¿Por que anda tan despacio?, y si os digo la verdad no recuerdo ni como he contestado a esas preguntas, no lo tenia preparado, pero sí me preocupa cuando se las hagan a Dani. Creo que él es todavía el menos consciente, o no, pero a mi me lo parece. Sinceramente, no sé muy bien como ir enfocando la posibilidad de que le pregunten.






Aun así, es curioso como muchos de los miedos que se tienen al principio se van pasando, y te acostumbras a vivir en la diferencia, inevitable con las miradas de los demás, pero sorprendentemente vives, y consigues hacerlo feliz, que al final es lo que realmente te tiene que importar. Porque aprendes a darte cuenta, de que más allá de lo que vives con el problema motor de Dani, hay miles de cosas que vives con tu hijo que superan todas las expectativas que tenias.








Espero la vuelta del verano con inquietud y emoción, porque al volver de cada verano, en los dos años de Dani, siempre ha habido un salto positivo en su evolución, el primer año aprendió a gatear y el año pasado se lanzo a dar los primeros pasos.








Feliz verano!